jueves, 5 de noviembre de 2009

Sáhara occidental y... de vuelta a la civilización

Queridos todos, tenéis que ir al desierto. Lo vais a agradecer. Aquellos que seáis un poco más místicos (míticos) lo agradeceréis; aquellos que lo seáis menos, también.
Nunca pensé en sentirme tan pequeño, en un sitio tan... no diría grande. No sé cómo describirlo (aparte de árido -que agudo soy-)
Lo mejor del viaje, además de los paisajes, fue el grupo.
Tanto los 19 europeos que íbamos (incluido Llopis) hasta los nosecuantos locales, y con locales me refiero a gente del oasis, sus mujeres, amigos e hijos.
Los paisajes, indescriptibles. Hice más de 600 fotos en dos jornadas (muchas para tirar, todo hay que decirlo). Y creo que no pude abarcar lo que quería.
AQUI están.
El único incidente fue la quemadura de segundo grado que mi querido Llopis se hizo en el empeine izquierdo. Le pudo haber pasado a cualquiera, pero le pasó a él. Menos mal que se lo tomó bien (dentro de lo posible).

La vida por aquí continúa. Hay mil cosas, podría hablar de todo lo que me choca, pero quiero digerir un poco antes de hacerlo y tener un punto de vista "menos contaminado dada mi naturaleza occidental".

Después de un viaje así, choca volver a la civilización, al trabajo, a la casa (aunque me alegre poder pegarme una ducha). Después de algo así, me pregunto qué estarán viviendo mis compañeros y amigos de beca. Veo sus blogs y me alegro de que escriban cosas como las que escribo yo.

De vuelta a El Cairo.
Ya tenemos internet en casa. La baja de Llopis durante la campaña del desierto impidió que pudiésemos establecer la línea de comunicaciones prevista con la telaraña mediática mundial. La labor fue ardua: socorrer a Llopis, alimentarlo, mantener la presencia en el frente de la capital (en la oficina) y, ya que mi compañero se debatía entre la necesidad de salir y la muerte por aburrimiento crónico, decidí adoptar la misión mediática como mía y salir en busca del enemigo.
Así fue como encontré al señor Muntasser (prometo "afoto") agazapado en su guarida con mirada esquiva. No pudo conmigo. Junto con Mohammed el de seguridad y en el coche del primero, nos pusimos rumbo al cuartel general del mando telemático y de comunicaciones. Sin temor. Sin piedad. Sabía lo que quería... e iba dispuesto a conseguir la victoria a casi cualquier precio. Y así fue. Eran las 18:15 hora Zulú cuando salí de la batalla. Tenía apenas dos horas para volver a casa, conseguir los papeles, fotocopiarlos y volver al cuartel enemigo esquivando la seguridad. Fue duro pero lo conseguí. Volví a las 20 hora Zulú a casa sin un rasguño. Instalé el módem y di a Llopis las instrucciones precisas para la configuración del módem. Me marché a la cena que tenía con unos amigos.
Volví. Router apagado. Algo había ido mal.
No fue hasta la tarde siguiente, después de 5 llamadas, 4 Mohammed, 7 Ahmed, 1 Iman y 3 Hassan que conseguí que conectaran mi línea porque a "alguien" se le había "olvidado" activarla el día anterior (Joaquín, la sombra de ONO es alargada). Al menos no usaron la técnica del "tire del cable y vuelva a encederlo". Algo es algo.
A día de hoy, Llopis se recupera, la lavadora no da guerra e internet casi no se cuelga.
Esto, señores, ya no es una casa, ni siquiera un hogar. Esto es mucho más. Un palacio, por lo menos.

Hoy es Jueves. Empieza nuestro fin de semana.
Mañana escribiré sobre "nuestros" días de la semana.
Sed buenos.

2 comentarios:

  1. Si es que la maldad de las telecos no no entiende de fronteras!! :-)
    Impresionan las fotos del desierto!! Da la sensación de que si te sales un poco del campamento, igual ni eres capaz de encontrar el camino de vuelta!!
    En fin, que comparado con la pequeña urbe en la que nos hemos criado...
    Un abrazo

    P.D.
    No obstante este finde me he comido una caldereta de jabalí, no creo que hagais Kebabs de eso, habrá que esperar a que salgais del medio evo!! :-)

    ResponderEliminar
  2. Que mamón! Menos mal que dentro de nada me llegan provisiones... espero que no las paren en aduanas jaja. Seguro que el policía aduanero es hermano del "piraña".

    ResponderEliminar